29 gennaio 2009

La storia della voce antifranchista che arrivava dall'Est

Leggo sul blog di Francesco Cecconi dell'uscita in Spagna di un libro su Radio España Indipendiente, uno dei simboli assoluti della guerra fredda. REI era nata nel 1941 in seno al Komintern - operò da Mosca, poi, dal 1955, da Bucarest - e faceva ascoltare agli spagnoli la voce, clandestina, del partito comunista e degli antifranchisti. Franco era un dittatore spietato e su queste cose non scherzava. L'ascolto, in patria, fu osteggiato in tutti i modi, compreso quello tecnologico: le frequenze di REI erano disturbate dai jammer, come del resto facevano i sovietici con Radio Liberty.
A fine 2008 il giovane scrittore e storico di Toledo Luis Zaragoza Fernández ha dedicato all'emittente, nota in Spagna come La Pirenaica (si annunciava così, ma trasmetteva molto più a est...), un volume di quasi 500 pagine, analizzandone personaggi e contenuti. El Pais ne ne ha parlato a dicembre. Qui di seguito inserisco anche una breve recensione del giornale della Mancha La Cerca. Il libro è edito da Marcial Pons. Le trasmissioni di REI proseguirono per qualche tempo dopo la morte di Franco, ma nel frattempo il partito comunista era uscito dalla clandestinità e la Spagna imboccava il cammino di una democrazia e di una modernità che oggi, ripensando agli anni in cui anch'io mi sintonizzavo su quelle frequenze disturbate, le invidio molto. Il radioamatore spagnolo Josè Maria Martinez ha pubblicato sul suo sito l'audio del saluto che la Estacion Pirenaica diffuse, per l'ultima volta, nel 1977, dopo 36 anni di trasmissione.

La historia de la emisora Radio España Independiente que emitió desde la clandestinidad entre los años 1941 y 1977

Martes, 20 de enero de 2009

Caja Castilla La Mancha patrocina la obra “Radio Pirenaica. La voz de la esperanza antifranquista”, escrita por el periodista e historiador toledano Luis Zaragoza Fernández. Se trata de un volumen que repasa la historia de la emisora Radio España Independiente que emitió desde la clandestinidad durante los años de la dictadura franquista.
A lo largo de cerca de quinientas páginas, el autor nos acerca los pormenores de una emisora de radio de la que muchos han oído hablar, pero que pocos conocen. Envuelta en el combate contra la dictadura franquista desde la clandestinidad y rodeada durante mucho tiempo de mitos y silencios, «Radio España Independiente, Estación Pirenaica» fue la emisora dirigida por el Partido Comunista de España que transmitió hacia nuestro país entre 1941 y 1977, primero desde la Unión Soviética y después desde Rumania.
Este libro analiza las etapas que atravesó la emisora y quiénes la hicieron posible, cómo fueron modificándose su programación y su estilo, cuál fue su audiencia y cómo se enfrentó a ella la dictadura. Una radio que, según Zaragoza Fernández, pretendía contar la realidad de la sociedad española que el Franquismo trataba de ocultar (huelgas, manifestaciones…), además de su componente propagandístico por su propia naturaleza de emisora clandestina. Así pues, sale a la luz una página importante de la resistencia antifranquista, inédita hasta la fecha y por fin recuperada para la memoria colectiva treinta años después.
Luis Zaragoza Fernández (Villacañas, Toledo, 1978) es doctor en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid (con premios extraordinarios de licenciatura y doctorado), además de licenciado en Geografía e Historia por la UNED. Ha participado en diversos congresos y colaborado en diferentes publicaciones relacionadas con la historia y la comunicación. Actualmente trabaja en Radio Nacional de España.
El germen de su obra nace tras las investigaciones que, durante cuatro años, realizó para elaborar su tesis doctoral. Además de afrontar las distintas etapas de desarrollo de su investigación –falta de fuentes orales, obstáculos burocráticos…- tuvo que enfrentarse a las dificultades derivadas de su ceguera. Su interés por la Historia de la Comunicación, especialmente el ámbito en que ambas disciplinas confluyen, su tenacidad por reconstruir una parte confusa de nuestra historia y su disposición para escudriñar minuciosamente por archivos, documentos, apuntes y bibliotecas y hablar con protagonistas, colaboradores o testigos, más o menos directos, han dado como resultado esta obra historiográfica sobre Radio España Independiente. Un tema que nunca antes había sido abordado, de forma tan completa, desde una perspectiva científica y académica.
“Radio Pirenaica” ha sido publicada por la editorial Marcial Pons con la colaboración de la Obra Social de Caja Castilla La Mancha que, con su patrocinio, cumple el objetivo de fomentar la creación literaria, especialmente entre los autores noveles.

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La Pirenaica
MANUEL RODRÍGUEZ RIVERO 03/12/2008

Sobrevivió a Franco -de quien quiso ser Némesis- casi dos años. Había nacido en Moscú en 1941, apadrinada por la Komintern, cuando la "Patria del Socialismo" parecía derrumbarse bajo el empuje de los tanques alemanes de la Operación Barbarroja. Oficialmente se llamó Radio España Independiente (REI), pero fue conocida con el nombre de guerra de La Pirenaica, porque sus responsables deseaban sugerir la máxima cercanía a la España amordazada.
Ése fue uno de los primeros mitos construidos en torno a la legendaria emisora de radio, pronto convertida en la "voz" más conspicua de la resistencia antifranquista. Nunca estuvo allí, ni fija, ni móvil, aunque hubo quien estaba convencido de que la emisora era trasladada casi a diario de un lugar a otro de la cordillera para burlar a sus enemigos. No estuvo afincada en otros lugares que en la capital soviética -salvo unos meses en Ufa, cuando Moscú estuvo en peligro- o en Bucarest, desde donde emitió a partir de 1955, cuando la "guerra fría" entraba en su fase gélida.
Tras su creación, Carrero Blanco, subsecretario de la Presidencia, firmó inmediata y secretamente el decreto por el que se creaba -atención- el Servicio de Interferencia Radiada. De ese negociado dependían los insoportables chirridos eléctricos, las insidiosas estridulaciones, los repentinos trompetazos y las encadenadas crepitaciones que siempre acompañaban -como música del infierno- tanto las emisiones políticas o informativas como las lecturas dramatizadas de novelas edificantes cuyos abnegados personajes eran portadores de los valores que adornarían al hombre "nuevo" (y a "su compañera") por el que combatían los comunistas.
Y es que la REI era la emisora del PCE: un eficacísimo canal clandestino que contribuyó extraordinariamente a difundir "en el interior" la idea de que los comunistas eran la única oposición verdaderamente organizada a la dictadura. Radio Pirenaica, la voz de la esperanza antifranquista (Ediciones Marcial Pons), de Luis Zaragoza Fernández, despliega la historia de aquella emisora que fue transformándose a medida que lo hacía el contexto político internacional y, sobre todo, el partido de la que era portavoz e instrumento de propaganda: desde el estalinismo seguidista al "eurocomunismo" de los setenta, del apoyo inquebrantable a la URSS a la crítica de la invasión de Checoslovaquia por las tropas del Pacto de Varsovia. Y que, hasta su disolución en 1977, fue la única radio de un partido político español que de forma permanente y continua presentó una alternativa a la propaganda franquista.
Basándose en una enorme cantidad de fuentes primarias y secundarias (desde el archivo del PCE a la transcripción de los programas; del fichero de cartas de los oyentes a las entrevistas orales con los redactores), Luis Zaragoza reconstruye sin maniqueísmos ni nostalgias la historia de aquella emisora de radio dirigida a un sector de la población imposible de cuantificar, pero que cada noche manipulaba el dial de onda corta de su receptor -sin subir demasiado el volumen- con el propósito de encontrar la información, orientación y -quizás- esperanza que no podía obtener de otro modo.
En aquel precario mercado de noticias, La Pirenaica se convirtió -con sus leyendas y sus mitos, con sus mezquindades y fracasos, con sus escandalosas complicidades y sus implacables denuncias- no sólo en instrumento de encuadre e información de militantes y simpatizantes, sino en una especie de símbolo de resistencia y combate contra el fascismo y por la libertad. En ella trabajaron gentes conocidas -de Dolores Ibárruri a Jordi Solé Tura, de Antonio Ferres o Andrés Sorel a Teresa Pàmies o Peru Erroteta- y otras que nunca llegaron a serlo más que para sus conmilitantes y radioescuchas. Conocer su historia ayuda a comprender mejor un tiempo y un país que hemos dejado atrás. Pero que a veces alguien se empeña en convocar, como los espiritistas a sus espectros.

1 commento:

Anonimo ha detto...

Era ora che scrivessero un libro sull'argomento e su una delle sperienze di radio più appassionanti dello scorso secolo

Alessandro